por Daniel Perez | May 8, 2025 | Uncategorized
Cada vez más personas se plantean la posibilidad de instalar aerotermia en pisos como alternativa al gas natural o a sistemas eléctricos tradicionales. Aunque durante años se pensó que este sistema solo era viable en chalets o viviendas unifamiliares, hoy sabemos que también puede funcionar perfectamente en pisos… siempre que se cumplan ciertas condiciones.
La aerotermia es una tecnología que aprovecha la energía del aire exterior para climatizar el hogar y generar agua caliente sanitaria. Funciona mediante una bomba de calor que extrae energía térmica del ambiente y lo transfiere al sistema de calefacción o ACS. Y todo ello con una eficiencia energética muy superior al aire acondicionado o una caldera de gas.
Entonces, ¿se puede instalar aerotermia en pisos? La respuesta es sí, pero depende de varios factores: el espacio disponible, la potencia contratada, el tipo de emisores y el nivel de aislamiento de la vivienda. Vamos a analizarlo en detalle.
¿Qué tipo de pisos pueden tener aerotermia?
La aerotermia en pisos es especialmente recomendable en viviendas de tamaño medio o grande, con consumo alto de calefacción y agua caliente. Cuanto mayor es el uso del sistema, mayor será el ahorro a medio plazo. De hecho, en un piso de 100 m² con buen aislamiento, el ahorro frente al gas natural puede superar los 350 €/año.
En pisos pequeños o con poco uso de la calefacción, también puede instalarse, aunque el retorno de la inversión será más lento. En estos casos, puede optarse por aerotermia solo para ACS, usando un aerotermo compacto que sustituya al termo eléctrico o al calentador de gas. Esta solución es especialmente útil en zonas donde no se requiere calefacción.
¿Qué ventajas ofrece la aerotermia en pisos frente a otros sistemas?
- Mayor eficiencia: una bomba de calor aerotérmica puede alcanzar rendimientos de hasta 400 %. Es decir, por cada kWh que consume, puede generar hasta 4 kWh de calor.
- Energía renovable: al utilizar el calor del aire, se reduce el uso de combustibles fósiles.
- Bajo mantenimiento: no requiere revisión anual como las calderas.
- Compatible con emisores existentes: en muchos casos, se pueden aprovechar los radiadores ya instalados.
- Instalación sencilla si el piso dispone de espacio suficiente y permisos.
¿Tiene sentido instalar aerotermia en pisos pequeños?
Aunque es más rentable en viviendas con mayor demanda térmica, también se puede instalar aerotermia en piso pequeño. En estos casos, se recomienda:
- Optar por un sistema monobloc para reducir el espacio ocupado.
- Priorizar la instalación de aerotermia para ACS si no se necesita calefacción.
- Asegurarse de tener un buen aislamiento térmico para aprovechar todo el potencial del sistema.
En pisos de 50 a 70 m², la inversión se amortiza en más años (entre 8 y 12), pero sigue siendo una apuesta segura a largo plazo gracias a la durabilidad de los equipos (más de 25 años) y al confort que ofrecen.
Requisitos para instalar aerotermia en pisos
Aunque la aerotermia en pisos es una solución cada vez más viable, requiere cumplir ciertas condiciones mínimas para que su funcionamiento sea eficiente, seguro y rentable. Aquí te explicamos los principales aspectos a tener en cuenta antes de decidirte a instalarla.
1. Espacio exterior disponible
Para que funcione correctamente, es necesario colocar una unidad exterior que capte la energía del aire. Esta unidad es similar a la de un aire acondicionado y se puede ubicar en:
- Una terraza
- Un patio interior
- La fachada del edificio (previo permiso de la comunidad)
Lo importante es que tenga una buena ventilación y que el lugar no impida su mantenimiento o sustitución. En la mayoría de los casos, ocupará menos de 1 m³.
2. Espacio interior para el equipo
Además de la unidad exterior, la aerotermia en pisos requiere espacio para la unidad interior, que puede incluir:
- Bomba de calor interior
- Depósito acumulador de ACS (agua caliente sanitaria)
- Intercambiadores y sistemas hidráulicos
El conjunto puede ocupar el espacio equivalente a una nevera o armario alto. Se suele colocar donde antes estaba la caldera: en la cocina, el lavadero o el tendedero cerrado.
3. Potencia eléctrica suficiente
Uno de los requisitos más importantes para instalar aerotermia en pisos es contar con una instalación eléctrica adecuada. La potencia contratada puede necesitar ampliarse entre 2 y 4 kW adicionales, dependiendo de:
- El tamaño del piso
- El aislamiento térmico
- El número de personas que viven en la vivienda
- El tipo de emisores (radiadores, fancoils o suelo radiante)
En un piso de 100 m², lo habitual es que la aerotermia funcione bien con una potencia total contratada de entre 5,5 y 7,5 kW.
4. Buen aislamiento térmico
La eficiencia de la aerotermia en pisos está muy relacionada con el aislamiento del edificio. Un piso mal aislado perderá calor en invierno y ganará temperatura en verano, obligando al sistema a trabajar más.
Mejoras recomendables:
- Ventanas con doble acristalamiento
- Eliminación de puentes térmicos
- Aislamiento de paredes o techos
- Instalación de persianas o cortinas térmicas
Un buen aislamiento puede mejorar la eficiencia del sistema hasta en un 30 %.
5. Permisos y normativa
Es imprescindible cumplir la normativa vigente. En algunos casos, puede requerirse:
- Permiso de la comunidad de vecinos (si se instala en fachada o zonas comunes)
- Licencia de obra menor (para intervenciones en la red hidráulica o eléctrica)
- Proyecto técnico y boletín eléctrico si hay modificación de potencia
Un técnico especializado en aerotermia en pisos puede ayudarte a gestionar toda esta documentación y garantizar que la instalación cumple con la normativa local y nacional.
Tipos de emisores compatibles con aerotermia en pisos
Uno de los aspectos clave al instalar aerotermia en pisos es elegir el sistema de emisión térmica adecuado. La aerotermia funciona a baja temperatura, por lo que no todos los emisores ofrecen el mismo rendimiento ni el mismo grado de confort.
Radiadores de alta temperatura
Si ya tienes radiadores instalados y están en buen estado, es posible mantenerlos con una bomba de calor de alta temperatura, capaz de alcanzar hasta 80 °C. Esta opción permite:
- Aprovechar la instalación existente
- Ahorrar en reformas
- Conservar el confort térmico clásico
Inconvenientes:
- Menor eficiencia que con otros emisores
- Solo sirve para calefacción, no para refrigeración
- Mayor coste del equipo
Esta opción es muy habitual cuando se cambia una caldera de gas por aerotermia en pisos sin hacer reforma completa.
Suelo radiante (y refrescante)
Es la solución más eficiente y confortable. Se instala bajo el pavimento y permite tanto calefacción en invierno como refrigeración en verano.
Ventajas:
- Reparte el calor de forma uniforme
- Ahorra energía al funcionar a baja temperatura (35–45 °C)
- Compatible con equipos de aerotermia estándar
- Ocupa cero espacio visible
Desventajas:
- Requiere reforma y obra
- Mayor coste inicial
- Tiempo de instalación más largo
En proyectos de reforma integral o viviendas de nueva construcción, suelo radiante y aerotermia en pisos forman una combinación ideal.
Fancoils
Los fancoils o ventiloconvectores son emisores que funcionan tanto para calefacción como para refrigeración. Se instalan en pared, suelo o techo, y se conectan al sistema de aerotermia mediante conductos de agua.
Ventajas:
- Instalación rápida
- Coste intermedio
- Climatización en dos direcciones
- Muy adecuados en zonas húmedas (donde el suelo refrescante puede generar condensación)
Desventajas:
- Ligeramente más ruidosos que otros sistemas
- Menor confort que el suelo radiante
- Requieren mantenimiento regular del ventilador y filtros
¿Cuándo compensa instalar aerotermia en pisos?
La rentabilidad de la aerotermia en pisos depende de varios factores:
1. Superficie y consumo
- En pisos grandes (100 m² o más): el consumo de calefacción y ACS justifica la inversión, que puede amortizarse en 5–7 años.
- En pisos pequeños (menos de 70 m²): se gana sobre todo en confort, pero el retorno de la inversión es más lento (8–12 años).
2. Estado del sistema actual
- Si tu caldera es antigua, da fallos o tiene baja eficiencia, cambiar a aerotermia puede ser una gran mejora.
- También es una buena opción si no tienes acceso a gas natural o quieres eliminar el consumo de combustibles fósiles.
3. Situación del edificio
- Si tu edificio tiene buen aislamiento, la aerotermia te aportará un gran ahorro energético.
- Si además hay posibilidad de instalar placas solares (previo acuerdo de la comunidad), el ahorro será aún mayor.
Conclusión: ¿merece la pena la aerotermia en pisos?
Instalar aerotermia en pisos es cada vez más habitual, no solo por el ahorro, sino también por el confort térmico, la sostenibilidad y la posibilidad de eliminar por completo el gas o el gasóleo.
Eso sí, no todas las viviendas cumplen las condiciones ideales. Por eso, lo más recomendable es consultar con un técnico especializado en aerotermia, que pueda estudiar tu caso y diseñar una solución a medida.
por Daniel Perez | Abr 15, 2025 | Uncategorized
Cuando el quemador de la caldera no enciende, el sistema entero deja de funcionar: no hay calefacción, ni agua caliente sanitaria, y en invierno, esto puede convertirse en una urgencia doméstica. El quemador es el componente encargado de generar la llama que calienta el intercambiador de calor. Si no se activa, el ciclo de producción térmica se interrumpe.
Aunque muchas calderas modernas disponen de sistemas de autodiagnóstico, entender por qué el quemador no enciende puede ayudarte a actuar con rapidez. A veces se trata de un fallo menor que puede solucionarse fácilmente. Otras veces, es necesario contactar con un servicio técnico de calderas especializado para evitar riesgos o daños mayores.
Quemador de la caldera no enciende: causas más comunes
Cuando el quemador de la caldera no enciende, los motivos pueden ser distintos y, en muchas ocasiones, varios factores pueden estar relacionados. A continuación, te explicamos las causas más frecuentes que encontramos como técnicos de ManAIR S.A.T. Servicio técnico especializado:
1. Problemas con el suministro de gas
Una de las razones más habituales es que el gas no llegue correctamente a la caldera. Esto puede deberse a:
- Válvula de gas cerrada o bloqueada.
- Corte en el suministro de gas en la vivienda.
- Baja presión de gas natural o GLP.
- Fugas o aire en el circuito.
En todos estos casos, la caldera detecta el fallo y bloquea automáticamente el encendido del quemador por seguridad.
2. Fallos en el encendido electrónico o en el electrodo
El sistema de encendido puede estar dañado o sucio. Si el electrodo no genera la chispa correcta, la caldera no iniciará la combustión. Esto es habitual cuando hay:
- Electrodo de encendido mal colocado o deteriorado.
- Suciedad acumulada en el punto de chispa.
- Cableado suelto o deteriorado.
- Fallo del transformador de encendido.
3. Termopar o detector de llama defectuoso
En calderas con llama piloto, el termopar es un sensor de seguridad que detecta si la llama está presente. Si no, corta el paso de gas para evitar fugas. Cuando está desgastado o sucio, puede impedir el encendido del quemador, incluso si hay chispa.
En modelos más modernos, la detección de llama se hace por ionización. Si este sistema no capta señal, el quemador tampoco se mantiene encendido.
4. Acumulación de suciedad en las toberas
En ocasiones, el quemador de la caldera no enciende porque las toberas están obstruidas por polvo, óxido o residuos de combustión. Esto impide la mezcla correcta de gas y aire, o directamente bloquea el paso de gas.
5. Baja presión de agua o bloqueos de seguridad
Aunque no lo parezca, una presión de agua insuficiente en el circuito cerrado puede impedir el encendido del quemador. Las calderas modernas llevan sensores de presión (presostatos) que bloquean el encendido si la presión está por debajo de 1 bar.
También es posible que haya bloqueos por seguridad programada tras varios intentos fallidos de arranque. En esos casos, puede ser necesario realizar un reseteo, pero siempre respetando el manual del fabricante.
Cómo actuar si el quemador de la caldera no enciende
Cuando el quemador de la caldera no enciende, lo primero es no alarmarse ni manipular componentes internos si no tienes conocimientos técnicos. Muchas averías aparentes tienen solución sencilla, pero también hay riesgos si se interviene sin experiencia. A continuación te explicamos qué puedes revisar con seguridad, y en qué casos conviene contactar con un servicio técnico especializado como ManAIR S.A.T.
Revisa lo básico: gas, electricidad y presión
Antes de nada, asegúrate de que:
- La caldera está conectada a la corriente eléctrica y el enchufe funciona correctamente.
- La llave de paso del gas está abierta y no hay cortes en el suministro.
- La presión del circuito de calefacción está entre 1 y 1,5 bares, con la caldera apagada. Si está baja, puedes abrir la válvula de llenado siguiendo el manual del fabricante. Si, por el contrario, la presión es demasiado alta, puedes purgar los radiadores hasta que se estabilice entre 1 y 1,5 bares.
Estas comprobaciones no requieren abrir la caldera ni manipular piezas internas. Si tras revisar estos puntos el quemador de la caldera no enciende, es momento de pasar al siguiente paso.
Identifica posibles códigos de error en el display
Muchas calderas modernas muestran códigos de error cuando algo falla. Consulta el manual para interpretar el mensaje que aparece en pantalla. Algunos códigos comunes relacionados con el quemador son:
- Error por falta de gas o llama (F28, F29, etc. según el fabricante)
- Bloqueo por intento de encendido fallido
- Problemas en el electrodo o en la sonda de ionización
Si el código sugiere un fallo interno o no lo puedes identificar, evita realizar pruebas por tu cuenta. El quemador de la caldera no enciende por motivos que deben diagnosticar técnicos cualificados.
Qué hacer si la caldera echa chispas pero no arranca
Este es un síntoma frecuente: la caldera intenta encenderse, se escucha el clic del encendido, pero el quemador no se activa. En estos casos:
- Verifica que no haya corrientes de aire cerca del equipo que puedan apagar la llama piloto.
- Si el modelo es antiguo y usa llama piloto manual, comprueba si el termopar está sucio o mal alineado.
- En modelos modernos, puede tratarse de un fallo en el electrodo o en el sistema de detección de llama.
Estas comprobaciones no deben implicar desmontajes. Si el quemador de la caldera no enciende después de varios intentos, es recomendable hacer un reset del equipo (botón “R” o similar), siguiendo las instrucciones del fabricante.
¿Es necesario ajustar la válvula de la llama piloto?
Algunas calderas permiten ajustar la intensidad de la llama piloto mediante un tornillo en la válvula. Esta operación solo es válida en modelos antiguos y requiere precisión. Una llama débil puede apagarse fácilmente o no calentar el termopar, lo que impide el encendido del quemador.
En ManAIR S.A.T. recomendamos no manipular la válvula sin experiencia previa. Si el quemador de la caldera no enciende por este motivo, lo más seguro es que un técnico lo revise y ajuste correctamente.
Cuándo llamar a un técnico especializado
Aunque algunos usuarios optan por revisar el panel de control o purgar los radiadores, cuando el quemador de la caldera no enciende y no se resuelve con las comprobaciones básicas, lo más prudente es contactar con un profesional especializado en calderas.
Manipular el quemador, el termopar, el electrodo o el sistema de gas sin conocimientos específicos puede agravar la avería, generar riesgos de fuga o incluso provocar daños estructurales en la caldera.
Señales claras de que debes llamar a un técnico:
- El quemador no se activa tras varios intentos de encendido y la caldera entra en bloqueo.
- Aparecen códigos de error relacionados con la llama, el gas o el encendido y no desaparecen tras hacer un reset.
- El electrodo o la sonda de ionización están sucios o mal alineados y no sabes cómo acceder a ellos con seguridad.
- El termopar no mantiene la válvula abierta o hay sospechas de fallo eléctrico.
- Escuchas clics de ignición pero no ves llama, o la llama se apaga enseguida.
Además, si el quemador de la caldera no enciende en una caldera que ya tiene más de 10-12 años, conviene valorar si el fallo es puntual o parte de un desgaste general del equipo.
¿Por qué confiar en un técnico de ManAIR S.A.T.?
En ManAIR S.A.T. contamos con técnicos especializados que no solo identifican el motivo por el que el quemador de la caldera no enciende, sino que:
- Usan herramientas de diagnóstico específicas.
- Realizan ajustes de presión y limpieza del quemador con total seguridad.
- Sustituyen piezas como termopares, electrodos o tarjetas electrónicas con recambios compatibles.
- Verifican el correcto funcionamiento del sistema tras la intervención.
Nuestro servicio técnico no se limita a reparar: también prevenimos futuras averías con recomendaciones de mantenimiento personalizadas según el tipo de caldera, antigüedad y uso.
Prevención: cómo evitar que el quemador de la caldera no encienda
Una de las mejores formas de evitar que el quemador de la caldera no encienda en el momento más inoportuno es realizar un mantenimiento regular. Muchas averías se deben a la acumulación de suciedad, desgaste de piezas o falta de ajustes mínimos.
Consejos para mantener tu caldera en buen estado
- Haz una revisión anual del equipo, preferiblemente antes del invierno.
- Comprueba la presión del circuito cerrado al menos una vez al mes.
- Evita almacenar productos inflamables o húmedos cerca de la caldera.
- No bloquees las rejillas de ventilación ni la salida de humos.
- Solicita la limpieza del quemador cada 1-2 años, especialmente si vives en zonas con polvo, humedad o agua dura.
- Vigila el comportamiento de la llama: si es amarilla, irregular o muy débil, podría haber un problema.
Prevenir es siempre más económico que reparar. Muchos de nuestros avisos de urgencia se podrían haber evitado con una pequeña revisión.
Conclusión: si el quemador de la caldera no enciende, actúa con responsabilidad
Que el quemador de la caldera no enciende es una de las averías más comunes en invierno, pero también una de las más evitables si se sigue un buen mantenimiento. A veces se trata de un fallo menor, pero en muchos casos hay que actuar con rapidez para no quedarse sin calefacción ni agua caliente.
En ManAIR S.A.T. estamos preparados para ayudarte: identificamos el problema, lo solucionamos con garantías y te asesoramos para que no vuelva a repetirse. Si notas que el quemador no arranca, la llama se apaga o el sistema entra en bloqueo, contacta con nosotros y un técnico especializado acudirá a tu domicilio para resolverlo.